Monday, June 2, 2025

Segunda carta a Bella

Buenos días de vuelta, Bella. Me alegra que me conozcas, y que me hayas respondido. También me alegra saber que sos feliz. Sin ninguna duda te merecés toda la felicidad posible. Es bueno saber que a tu marido se le fue el hechizo y ya no es una bestia horrorosa, sino simplemente un humano horroroso. Pero parece que quién sigue hechizada sos vos. No te culpo, sé lo que es el amor, y que uno en una situación así no tiene nada claro. Justamente yo te quiero ayudar en eso. Te lo aseguro: una sola cita, y listo. Se te va a aclarar todo, por sí o por no. Yo sé que va a ser por sí, pero digamos que es posible que no te guste. Se termina ahí, no te molesto nunca más. Lo único que te pido, de todo corazón, es una posibilidad. Con una sola me conformo.
Anoche soñé con vos. Espero que no te moleste que me anime a contártelo. Soñé que huíamos de tu castillo, corriendo, de la mano. Los dos enamorados, aunque no hace falta soñarlo para verme enamorado. Atrás quedaba tu pareja. En mi sueño era una bestia, pero vamos a mutarlo a un hombre, si es lo que querés. Pensalo un segundo, y decime sinceramente si no te gustaría. No hace falta que sea corriendo, o a escondidas de tu hombre. Como vos quieras. Pero de verdad: ¿no te gustaría un cambio de aire?
Perdón, quería hacer más corta la carta, pero no puedo reprimir mis pensamientos. En fin, quería decirte que yo sí creo en un “nosotros”. Creo que es posible. Creo que seríamos felices. Creo que nos sentiríamos realizados. Creo que te puedo brindar todo lo que necesites en la vida, y más. Y por último, y probablemente más importante, creo que si me das una sola chance, te lo demuestro. Ojalá cambies de parecer. 
Te mando un abrazo gigante, Bella. Tan grande como el amor que te tengo.
Diego.


No comments:

Post a Comment

Secreto Familiar

Corría el año 2011. O recién arrancaba, mejor dicho. Era enero, segunda quincena de enero. Plena temporada. Como siempre, veraneamos en Neco...